La persistente lluvia caída durante el pasado fin de semana puede ser la causante del desplome de un muro de contención de un edificio ocurrido ayer en Segorbe, en una zona donde el Ayuntamiento ya había amonestado verbalmente a la empresa constructora por la deficiente compactación del suelo.
El desplome del muro ha puesto en peligro la propia estabilidad de la calle Romualdo Amigó, bajo la que se asienta además la seguridad de la residencia para discapacitados psíquicos colindante al solar en el que se construye la obra.
Por ello, el Ayuntamiento entregó ayer un escrito oficial a los responsables de la obra para que “tomen urgentemente las medidas correctoras que sean convenientes”. “No podemos tolerar que la empresa continúe con la obras como si nada pasara”, manifestó ayer a LAS PROVINCIAS de Castellón, el alcalde de Segorbe, Rafael Calvo.
Compactación insuficiente
Las escasas medidas de seguridad y deficiente compactación del terreno realizado por la constructora son visibles en la zanja que cruza la calle construida por la misma para canalizar el sistema de agua potable.
“Hace días la zanja cedió más de cuatro dedos. Le dijimos a la empresa que aquello estaba mal y lo tenia que arreglar. Queríamos ir a buenas pero la empresa no nos hizo caso, así que los técnicos municipales han estado esta mañana en la obra y han elaborado un informe de la situación”, explicó Calvo.
La aludida zanja representa un importante obstáculo para los usuarios de la residencia de discapacitados psíquicos, algunos de los cuáles tienen que utilizar sillas de ruedas.
Además, la zanja también es un peligro para los alumnos del colegio La Milagrosa, situado justo en frente de la residencia de discapacitados, máxime teniendo en cuenta que las puertas de acceso a ambos centros se encuentran ubicadas casi junto al horadado foso de canalización del agua.
El solar sobre el que se construye hace esquina entre el cruce de las calle Romualdo Amigó y Comunitat Valenciana, donde hasta hace poco más de un año se asentaba el complejo hotelero conocido como María de Luna.
Los propietarios del hotel vendieron parte del complejo, que fue adquirido por un promotor valenciano para construir viviendas de lujo, dada la idónea ubicación y extensión del antiguo complejo hotelero adquirido.
La construcción del inmueble ha sido criticada en diversas ocasiones por el grupo de los socialistas locales, ya que la empresa constructora ha suspendido y reiniciado reiteradamente la obra sin aparente justificación.
Fuente : "Las Provincias de Castellón"
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