La sentencia recoge que todos los casos que se detectaron estaban en la zona de riesgo de la empresa. El vecino ha desarrollado una incapacidad permanente que le impide trabajarLa empresa de Segorbe Jamones Pesón SL tendrá que pagar 114.855,64 euros a un vecino afectado por el brote de legionela acaecido en 2002. Así se desprende de la sentencia de la Audiencia de Castelló a la que ha tenido acceso Levante de Castelló y en la que se desestima el recurso de apelación que formuló la mercantil. La empresa alimenticia alegó, para presentar su recurso de apelación, "un error en la valoración de la prueba" ya que el juez no se pronunció sobre las excepciones planteadas.
No obstante, la sección tercera de la Audiencia considera que las excepciones sí fueron resueltas por en el auto del 19 de febrero de 2007. Además, se añade que el denunciado puede impugnar la decisión del juez pero no alegar que no fueron examinadas y que la juzgadora contaba con las pruebas necesarias para dictar su resolución.
Otro de los argumentos de la empresa fue "la falta de acción culposa y la inexistencia de nexo de causalidad entre el daño y la actividad de Jamones Pesón SL".
A este respecto, la Audiencia señala que los daños ocasionados responden a una acción negligente de la entidad. Para ello se basa en un informe de la Conselleria de Sanidad que fue ratificado por el jefe de los inspectores de Salud Pública que llevaron a cabo la investigación de los hechos. En el citado informe se apunta que todos los casos se encontraban en el área de riesgo de la empresa ubicada a menos de 500 metros de las viviendas de los afectados. Por último, la sentencia señala que en el caso concreto del denunciante, éste ha quedado afectados de una incapacidad permanente y absoluta para la realización de todo tipo de trabajos.
Los hechos
Cabe recordar que en la primera quincena de agosto de 2002 nueve vecinos de Segorbe se vieron afectados por la bacteria de la legionella. Tras revisar más de mil establecimientos de la capital del Alto Palancia por parte de los técnicos de las consellerias de Medio Ambiente y Sanidad, el 14 de agosto se detectó el foco en la torre de refrigeración de una empresa de alimentación que desde hacía algunos meses permanecía cerrada. En aquel momento se sancionó a la empresa con 3.000 euros. Fue entonces cuando el consistorio segorbino aprobó una línea de ayudas para las empresas que decidan sustituir las torres generadoras de frío por masa de agua por otras no causantes de la legionellosis como el frío por electricidad o por gas.
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