Empiezan los trabajos de renovación de la red eléctrica, el último paso necesario para abrir la instalación al público
El Ayuntamiento de Segorbe ha iniciado ya las obras de canalización de la nueva red de suministro eléctrico para el emblemático Teatro Serrano, cuya restauración y rehabilitación integral debía de haber concluido a finales del pasado 2007. Así lo anunció ayer el concejal de Fomento, Ángel Berga, quién señaló que «este es el último paso antes de poder inaugurar la instalación».
En concreto, detalló Berga, «la instalación de la nueva red eléctrica se llevará a cabo en un plazo relativamente corto, entre mes y medio o dos meses, después de los cuales el teatro ya podrá ponerse en funcionamiento».
La actuación requerirá un presupuesto superior a los 100.000 euros, financiados a través del convenio firmado entre la Conselleria de Economía, la empresa Iberdrola y el Ayuntamiento de la capital del Alto Palancia.
Cabe recordar que la prolongada demora en la puesta en funcionamiento de la instalación ha venido motivada por diversas causas, si bien la falta de una red de suministro eléctrico lo suficiente potente para alimentar la actividad que se le piensa dar al teatro ha sido la responsable de los retrasos acumulados durante el último medio año.
El resto de las causas se han debido a las modificaciones, ampliaciones aplicadas al proyecto original y complicaciones surgidas a la hora de adquirir varios inmuebles colindantes al mismo, debido al elevado número de copropietarios de los edificios y la dificultad para localizar a éstos.
En concreto, la restauración y remodelación integral del Teatro Serrano, adjudicado a finales de 2006 a la empresa Geocisa, ha precisado hasta el momento de una inversión superior a los dos millones y medio de euros.
La actuación permitirá ampliar y recuperar el emblemático inmueble, a la vez que sacar a la luz y restaurar el tramo de la muralla medieval que lo atraviesa.
El Ayuntamiento de Segorbe ha iniciado ya las obras de canalización de la nueva red de suministro eléctrico para el emblemático Teatro Serrano, cuya restauración y rehabilitación integral debía de haber concluido a finales del pasado 2007. Así lo anunció ayer el concejal de Fomento, Ángel Berga, quién señaló que «este es el último paso antes de poder inaugurar la instalación».
En concreto, detalló Berga, «la instalación de la nueva red eléctrica se llevará a cabo en un plazo relativamente corto, entre mes y medio o dos meses, después de los cuales el teatro ya podrá ponerse en funcionamiento».
La actuación requerirá un presupuesto superior a los 100.000 euros, financiados a través del convenio firmado entre la Conselleria de Economía, la empresa Iberdrola y el Ayuntamiento de la capital del Alto Palancia.
Cabe recordar que la prolongada demora en la puesta en funcionamiento de la instalación ha venido motivada por diversas causas, si bien la falta de una red de suministro eléctrico lo suficiente potente para alimentar la actividad que se le piensa dar al teatro ha sido la responsable de los retrasos acumulados durante el último medio año.
El resto de las causas se han debido a las modificaciones, ampliaciones aplicadas al proyecto original y complicaciones surgidas a la hora de adquirir varios inmuebles colindantes al mismo, debido al elevado número de copropietarios de los edificios y la dificultad para localizar a éstos.
En concreto, la restauración y remodelación integral del Teatro Serrano, adjudicado a finales de 2006 a la empresa Geocisa, ha precisado hasta el momento de una inversión superior a los dos millones y medio de euros.
La actuación permitirá ampliar y recuperar el emblemático inmueble, a la vez que sacar a la luz y restaurar el tramo de la muralla medieval que lo atraviesa.
El llamado Teatro Serrano comprende actualmente dos inmuebles anexos, con dos fachadas diferentes, cada una recayente a una plaza de la localidad. La fachada del renovado edificio da a la plaza del Almudín y la del edificio adosado a la plaza de la Cueva Santa.
Cabe destacar que el teatro fue construido allá por el año 1920 por las fuerzas conservadoras de la ciudad. El edificio fue incautado por el Estado en la Guerra Civil Española y, posteriormente, transferido a la Generalitat Valenciana.
Fuente: Las Provincias de Castellón
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